EL HURTO

CON EL MIEDO DE UN NUEVO AMANECER
EL ALMA SE DESAHOGA EN UN LLANTO LEVE
QUE HACE RODAR EL ROCIO DE LA MIRADA

TODO SE NUBLA SI NO SE ENCUENTRA
EL BRILLO DE UNA VOZ CONSOLADORA
PERMITIENDO EL PASO DE UN SENTIMIENTO ATERRADOR

SU IDA HARÁ A LOS ADEPTOS DE LA SOLEDAD
ALIADOS DE MI RESENTIMIENTO
PORQUE LA VIDA YA NO SE LLENA CON LAS SOBRAS DE UN AYER
NI SE CONFORMA CON EL FRUTO DEL AHORA

LA SUPERFICIE DE LA TUMBA DE LA DECEPCIÓN
SE VERÁ APACIBLE A LOS OJOS DEL ESPECTADOR
PERO EN LAS ENTRAÑAS DE SU SER
PESA LA SOMBRA DE TURBULENCIAS GRITANDO CON DESESPERACION
EL QUEDAR ABANDONADO
POR EL HURTO DE LA FANTASÍA DE QUE UN DIA FUE FELIZ

Con el corazón revuelto que no sabe si sentir o latir, con la firme idea que somos expectadores de nuestro propio circo.

Viendo el sol derretirse en mis manos, y soltando los ojos de disgusto por la aurora que llega demasiado pronto.

Soy contradicción de lo que soy, sentimientos de palabras encontradas de un cajón que se revuelve al repetir lo que digo sin cesar y que pienso sin sentir, más que siento es un desorden de emociones por salir.

Ahora quiero reir como antes, como siempre, ahora no quiero llorar del dolor que se siente, que se viene de la nada por la nada.

De locura vive la inspiración y yo que sabré cuando me ataca si sea dormida, si sea cantando o nomás confundida de un sentimiento vago.